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Cada día que pasa vas entendiendo y conociendo más a tu bebé y esto te va permitiendo intuir lo que necesita. Es normal que en ocasiones notes que tu recién nacido llora a menudo, incluso cuando ya le has dado de comer y quizás busques darle solución a esto dándole más alimento. Pero por eso es necesario que conozcas qué pasa con tu bebé en esta etapa.
Debes saber que el aparato digestivo de tu pequeñín lactante todavía está muy inmaduro, lo que le puede generar problemas en su flora intestinal o algunas dificultades para expulsar los gases.
Los cólicos suelen aparecer entre la tercera y la sexta semana de tu recién nacido, y tienden a reducirse en gran medida cuando ya cumple tres o cuatro meses de edad. Si tu recién nacido sigue llorando mucho después de esa etapa, te recomendamos consultar con tu médico las causas de su molestia.
¿Cómo diferenciar los cólicos de otras molestias?
Si a pesar del llanto y la molestia que notas en tu pequeñín, él sigue succionando cuando lo alimentas y ves que tiene buen apetito, es porque su comportamiento está dentro de lo que sucede normalmente en los bebés con cólicos. Pero si notas que no se alimenta bien o que su reflejo de succión no es fuerte, es momento de consultar con tu médico.
Otra señal a la que debes estar atenta es si el bebé no se deja cargar o es difícil calmarlo, pues cuando se trata de un cólico normal tu voz, abrazos y caricias logran disminuir sus tensiones.
Observa si hay señales de sangrado en sus deposiciones, pues no es normal que esto pase cuando se trata de un cólico. También es importante que tomes su temperatura y estés atenta si hay señales de fiebre. Si notas alguna de estas señales consulta inmediatamente con tu médico.
¿Qué hacer cuando tu bebé tiene cólicos?
Busca moverlo, esto lo relaja y lo distrae de la tensión. Mécelo, camina con él en brazos o en el coche.
Sácale los gases con más frecuencia, después de cada toma.
Ponle música que lo relaje, con vibraciones bajas que le generen tranquilidad.
Revisa que esté succionando correctamente y que cubra con su boquita toda la areola de tu seno, no sólo el pezón. Vigila que no esté tragando demasiado aire.
No lo alimentes acostado, trata de hacerlo semisentado
¿Qué masajes realizarle a tu bebé cuando tiene cólicos?
Masajes dos veces al día
Si tu bebé tiene dificultades para dar del cuerpo o para expulsar el aire, debes masajear la barriguita de tu bebé dos veces al día, en momentos distanciados de las crisis de dolor, durante mínimo dos semanas.
En sentido de las agujas del reloj
Masajea su barriguita en el sentido de las agujas del reloj. Ubícalo boca arriba y mueve las manos de izquierda a derecha. El toque debe ser suave al principio y, si muestra que le gusta, puedes ir aumentando.
Movimientos delicados con las rodillas
También puedes intentar cogiéndolo de los pies y llevándole sus rodillitas hacia la barriga con movimientos delicados; luego, ejerce una leve presión en su estómago y realiza movimientos circulares.
Llanto desesperado
Si las maniobras para calmar el llanto no lo logran, el bebé lleva más de dos horas llorando y tu ya te encuentras desesperada, es el momento de buscar al pediatra o consultar por urgencias, tal vez tu pequeñín esté experimentando una alteración de salud.
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